Gilipollas de mi

Nunca os ha pasado de llamaros a vosotras mismas gilipollas?
De pensar que seguir queriendo a alguien que te ha cambiado, olvidado o dejado como si fuéramos simples objetos, es de gilipollas, pero que aún así, estamos gilipollamente enamoradas de ese gilipollas?
Pues yo tengo uno de esos días, uno de esos días en los que sólo te apetece mandar a los tíos a la mierda, uno de esos días en los que sólo te apetece dejar de pensar en mariconadas románticas y olvidarte del romanticismo del amor, que leches! Mejor no enamorarse y degustarse con la mirada, tipo, anda miraa por allí va un tío bueno... Y olvidarse ya del enamoramiento... Pero quizás se deba a que soy la más gilipollas de todos y todas las personas gilipollas, que pese a todo, a todo lo que has jugado conmigo, a todo lo que te he dicho, a todo lo que he hecho, te sigo queriendo.
Quizás debería dejar de soñar con una segunda oportunidad, quizás debería dejar de pensar en ti, quizás debería dejarme ya de tanto mariconeo, ser directa, tener los intereses claros, y que tú no te encuentres en ellos.
Pero no puedo... Yo no soy así, quizás por fuera parezca dura, insensible y valiente, pero por dentro soy cobarde, sensible y tremendamente cursi.
Quizás por eso mi corazón se niega a olvidarte, por mucho que mi mente me diga que sería lo mejor.
Quizás por eso todavía me resigno a pensar en segundas oportunidades, en unos días más junto a ti...
Quizás por eso me encante verte, recorrerte con la mirada.
Pero no, ya no, a no ser que de verdad me quieras, debería olvidarte, pasar página, vivir la vida al momento, sin preocuparme del pasado o del futuro, pero pese a todo, sonreír, yo seguiré sonriendo.