martes, 23 de abril de 2013

Hace mucho que no me pongo a escribir, pero antes que nada, quiero poner una entrada de Cris A, que ya hace casi un mes que se la debo, esta la ha escrito ella :) Lo prometido es deuda.

Y entonces, llegas al límite. Te das cuenta de que todo lo malo que podía pasarte respecto a tu relación amorosa, ha ocurrido realmente. Lo que tanto temías se ha vuelto realidad. Has llegado oficialmente al límite, sabes que lo que estás sintiendo es lo peor que puedes llegar a sentir. Pero no, esto no es necesariamente malo. Si lo miramos con optimismo, no podemos estar peor. Si pasamos este último trago, el sprint final, las cosas mejorarán. Y, es que, estas experiencias nos sirven para madurar. Nos hacen darnos cuenta (definitivamente) de que ese chico no era el adecuado para nada. Podéis seguir siendo amigos, pero nunca nada más. Y él pasará página y saldrá con otras chicas, y simplemente tendremos que aceptarlo y seguir. Esto, es necesario superarlo. Lo superamos, lo tomamos con madurez, y lo que debe quedarnos es el recuerdo, y aprendemos una lección con ello. Las experiencias nos hacen crecer, esto es lo primordial que debemos tener en mente. ¿Que nos importará y nos dolerá? Sí, claro, eso es inevitable. Pero no debemos tomarla con él, ni con quien quiera que salga, pues están en su derecho de hacer lo que quieran, y si así son felices está bien… De todas maneras, soy yo la primera que dice que no elegimos lo que sentimos. No podemos enfadarnos con ellos, tampoco es como si quisieran hacernos daño… Sentimos compasión por aquellos que nos hacen daño involuntariamente, e intentamos perdonarles, pero… Por otro lado, no es tan fácil. No es tan fácil aceptar el dolor que te han causado. Puede haber sido involuntario, pero es real. Y no es tan fácil olvidarlo y hacer como que no ha pasado nada. Simplemente, hay que dejar pasar el tiempo y definir con él nuestros sentimientos, dejando nuestra confusión atrás. Pero, de todas maneras, hemos de ser fuertes, tampoco era la relación de nuestra vida, seguiremos adelante sin más. Y hay que estar alegre, porque la vida es así, y siempre pasan este tipo de cosas… Pero una cosa está clara. 0 rencor y a partir de ahora alegría. Estas cosas a partir de ahora, se enfrentan con lo más productivo del mundo, una sonrisa :)

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